Como surge

Ante la experiencia de ver partir físicamente a Patricio, sus padres y hermanas, tuvieron la posibilidad de recibir mucha ayuda, tanto tanatológica como terapéutica.

Estos y otros apoyos acompañados del gran amor de sus familiares y amigos, les han ayudado a seguir adelante.

“A veces la pena, la angustia, el dolor tan profundo y el miedo a lo que vendrá nos paralizan, los padres no sabemos qué hacer o a dónde acudir y esto hace que la pérdida se sobrelleve en silencio o sin esperanza.
Sentir la fuerza de Patricio todos los días, nos impulsó a buscar opciones, a adentrarnos en un trabajo personal y a querer compartir con otras familias en la misma situación, algunas de las vivencias que creemos ayudan a obtener nuevamente la paz, resignificar la ausencia, volver a sentirnos plenos y enaltecer el amor eterno de un hijo”